miércoles, 10 de junio de 2009

Ser humano.

Hoy nos escribe Jose Carlos Gilazaña, espero que les guste y lo disfruten.
Muchas gracias Don José.
Salud.

Ser humano.

El ser humano es un animal……bueno……sí, creo que hasta aquí voy bien, el cual habita en el planeta tierra.
Es mamífero, omnívoro, depredador, pecador desde que nace y racional, aunque esto último no sea haya podido demostrar científicamente. Tiene cuatro extremidades, aunque algunos pongan siempre por delante una quinta, que dicen hacerles más hombres, orejas, nariz, manos, boca y ojos que, a veces, se quedan cortos.
Desea a la mujer del prójimo, porque no desearla es imposible,( y, si no, es que no habéis visto bien a la mujer del prójimo) y no le quieren como a sí mismo.
Buscan la paz mediante la guerra, necesitan lo que no tienen y no valoran lo que tienen hasta que lo pierden.
Animal de costumbres, enfermo de rutina, crea máquinas para mecanizarse, construye banderas, fronteras, muros, vallas, límites, miedos, dogmas, leyes, promesas y, sin embargo, no puede vivir sin ser besado por una tal libertad, aunque solo sea de vez en cuando.
Crea dioses magnánimos y se pelea en su nombre, por lo cual sabemos que no los hacen caso.

En esta pequeña descripción, ahora tendría que venir la clasificación, por razas, pero creo que mas o menos todos sabemos lo que hay, y si sigo extendiéndome puedo equivocarme, ya que se menos que cualquiera y como lo único que esta seguro en este artículo es la primera reflexión, o sea que el ser humano es un animal, voy a clasificarles como hacen ellos con los demás animales, por ejemplo como en un zoo, un zoo humano.

En la jaula de los animales más peligrosos tendríamos a: Ambiciosos, mentirosos, avaros, soberbios, fanáticos, ansiosos de poder, violentos y portadores de armas, tanto los legalizados como los marrulleros de barrio y mercenarios, y por supuesto, dictadores, tanto los que se declaran como tales, como los disfrazados con palabras de buenas intenciones, diciendo que quieren un mundo mejor para todos, pero siguen alimentando un mundo de ricos y pobres, de privilegiados y sufridores, de sobras y necesidades, de sopa boba y pan duro.

En jaulas que se crean ellos mismos están los que viven apenados por este mundo pero no llegan ni a imaginar otro distinto, porque se agobian con los primeros animales mencionados, los que siempre dicen “no podré”, los que de granos de arena hacen montañas, aquellos a los que les dijo que no lola y cada vez que la ven con otro siguen maltratándose, los que saludan a la libertad pero con las manos esposadas.

Y revoloteando, sin barrotes que se lo impidan, pero condenados a vivir y respirar el mismo aire de este zoo, existen los soñadores que suelen estar mas despiertos y tener los ojos mas abiertos de lo que creen los simples roncadores. Los humoristas que hacen que las lágrimas resbalen alrededor de una sonrisa. Los payasos, que son niños que se equivocaron de cuerpo, los niños que nunca deberían de dejar de ser payasos. Los poetas que sueñan sueños de mujeres soñadas de las que no solo enamoran ojos, sino de las que habitan en el alma, viven acompañados por una tal soledad, viven para sentir verdades, engaños, miedos, libertades, necesidades, antojos, pasiones, tedios, amores, desamores, fidelidad, infidelidad, tristeza, alegría, y demás sentimientos que solo ellos saben retratar. Los pintores que hacen que no veamos sólo la realidad de esta realidad. Los músicos que mueven nuestros pies y aprietan al corazón o lo calzan con zapatos de plumas.... los artistas del trabajo, los artesanos del sudor, los equilibristas de los andamio.... los currantes de la amistad, los amigos de la solidaridad, los humildes, los repartidos, los que creen en otro mundo en este mundo, los que sufren si un niño no tiene pan y maldicen al culpable de este mal.... los culpables de no tragar con tanta mierda que nos quieren hacer engullir, con la que nos quieren utilizar para sus planes, los que hacen el bien sin esperar un cielo, un paraíso, un manojo de dinero.... sin esperar nada a cambio.

Por último, terminar diciendo, que no es lo mismo” el ser humano”, que ser humano, igual que no es lo mismo “el mudo”, que ser mudo.
“El mudo” era uno de mi pueblo que le llamaban así porque su tatarabuelo era mudo y el mote fue pasando de padres a hijos, pero había que ver lo que hablaba el “Joío” mudo, sobre todo si llevaba dos copas de más.

------------Jochete.










3 comentarios:

Susi dijo...

Jose... me has encantado¡¡¡¡ y tus fotos nene.. ya lo sabes.. me encantan¡¡¡

Mirta Pagano dijo...

Jose:
Bellisima fotografías , son realmente excelntes.
Mis felicitaciones!!!!!!!!

Rosa dijo...

pedazo de fotos!!!!!